
Compota de la abuela
Esta compota de manzana casera es suave, agridulce y endulzada de forma natural al gusto. Ideal para conservar y disfrutar durante meses.
Rinde: 4–5 frascos (300–370 ml)
Preparación: 20 minutos
Cocción: 15 minutos + 15 minutos de baño María
Tiempo total: 50 minutos
Ingredientes
- 2 kg de manzanas
- 150 ml de agua
- 2–3 cucharadas de zumo de limón
- 150 g de azúcar
- 1–2 cucharaditas de canela
Preparación de los frascos
- Lava bien los frascos y tapas con agua caliente y jabón, y enjuaga completamente.
- Mantén los frascos calientes en un horno a 100 °C durante 10 minutos o en agua caliente.
- Calienta las tapas por separado en agua caliente, no en el horno.
Preparación de la compota
- Pela las manzanas, quita los corazones y córtalas en trozos.
- Pon las manzanas, el agua y el zumo de limón en una olla grande y lleva a ebullición.
- Cocina a fuego lento durante 10–15 minutos hasta que estén blandas.
- Tritura con un prensador para textura rústica o usa una batidora de mano para obtener un puré fino.
- Añade azúcar, canela y una pizca de sal al gusto, y deja hervir suavemente durante 1–2 minutos más.
- Llena los frascos calientes con la compota caliente dejando 1 cm hasta el borde.
- Elimina burbujas de aire con un cuchillo y limpia bien el borde del frasco.
- Cierra las tapas con firmeza a mano.
- Coloca los frascos en una rejilla dentro de una olla grande, cúbrelos con agua caliente (al menos 2–3 cm por encima de las tapas).
- Lleva a ebullición y esteriliza durante 15 minutos (para frascos de 300–370 ml).
- Retira los frascos y deja enfriar sobre un paño sin tocar las tapas.
- Después de 12–24 horas, verifica el vacío: la tapa debe estar hundida (o si usas frascos Weck, retira las grapas y la tapa debe permanecer sellada).